2.7.11

Son culpables

Esta es una historia que viene de largo. Una historia en la que unos pocos, detentadores de todo tipo de privilegios injustos, han tratado de imponerse a las personas, impulsadas por el viento de los tiempos.

Teddy Bautista está entre rejas y aunque no se tirará allí toda su vida, se trata de un bello caso de justicia poética. Pero ¡ah!, en vez de estarse calladas, la ministra socialista y la presidenta popular nos dicen ahora algo así como ha de respetarse la presunción de inocencia. Curiosa coincidencia de los extremos clientelistas de ambos partidos.

Pero no, Teddy Bautista y con el los Victor Manuel, Sisa, los Caco Senantes o Ramoncines de este mundo (quien ahora tiene el cuajo de asegurar que va a demandar a la SGAE) así como los periodistas que han venido lamiendo la mano de ex-Canario hasta el momento de su detención, son culpables. Incluso aunque no hubieran quebrantado la ley. Muy culpables.

Son culpables de mentir una y otra vez hablando en nombre de la cultura, cuando lo cierto es que los artistas han venido recibiendo únicamente el 10%-15% de lo recaudado por esa sociedad. Cantidad que, además se repartía de forma que, al final, unos 600 de los reclamados 80.000 socios de la SGAE recibieran el 75% de la recaudación. No, la SGAE, bajo el mandato de Teddy Bautista, se ha convertido en una organización en defensa de la industria de lo audiovisual y de unos cuantos amigos a quienes se les pagan bien sus servicios publicitarios.

Son culpables de haber parido una ley, la del Canon, que sobre injusta extrae de cualquier control público una tasa sobre el consumo empresarial y privado. Ese dinero, así como el fondo de derechos sin reclamar, estaban llamando a gritos a la corrupción y no vale que argumenten con las auditorias que sufren. Las auditorias, si no son judiciales, se han convertido en trámites vergonzosos. Ese dinero descontrolado se ha invertido en proyectos mayestáticos, compra de teatros o incluso palacios que en nada benefician a los artistas y no son socialmente necesarios.

Son culpables de haber montado una red recaudatoria con actitudes matonas y lindando en lo mafioso. Cobrando como aves de rapiña incluso en festivales benéficos, tabernas, fiestas populares y todo lugar donde sonara una música, incluso aunque fuera anónima bajo afirmaciones como "Si, es anónima, pero seguro que esa transcripción que está usted usando tiene derechos de autor".

Son culpables de haber castigado a todo un país cuando saben que el gran negocio de la descargas lo están haciendo las compañías de telefonía y los lugares de almacenamiento online. Pero como Teddy no estaba dispuesto a dar la batalla contra Telefónica (como principal proveedor de ADSL), el y sus acólitos decidieron lanzarse contra los desvalidos, las personas y las pequeñas empresas.

Son culpables de haber iniciado y sustentado la represión en la red para defender los intereses de un oligopolio y de unos cuantos vividores. El colega sueco de Bautista decía hace bien poco "Esta muy bien esto de la pornografía en Internet, esto nos permitirá convencer a los políticos de lo necesaria que es la represión".

Son culpables de habernos insultado, menospreciado, denunciado, estafado y, en algunos casos, de haber intentado meternos en la cárcel por el simple delito de ofrecer datos o expresar una opinión.

Teddy y sus amigos son culpables de todo esto y algunas cosas más. Encima, es más que posible que hayan estafado. Solo serían un poco más culpables.

2 comments:

Eselsdistel said...

OLE, OLE y OLE. Y de paso una alegría volver a ver el blog funcionando... Saludos desde Viena, Costa!!

J.M. Costa said...

Muy buenas desde el horno madrileño estimado científico. Un abrazo.